"Pájaro Azul", Clara Cortés

Sinopsis: Ha pasado un año desde el accidente que tuvo lugar al final de la calle 118 y Simon aún ve el fantasma por todas partes: en la calle donde ocurrió, en su casa, en la tienda... Le sigue de cerca y solo él la puede ver. Todo el mundo parece haber pasado página, pero Simon se siente atrapado en una espiral de la que no sabe cómo salir.
María siempre ha tenido una forma muy curiosa de lidiar con los problemas: huir de ellos. Después de lo que pasó con su familia, tomó un avión y acabó en Francia, de donde era su madre, para empezar de cero su vida. Lo único que la une a su pasado son las postales que le envía a su hermano: siempre sin remitente; charlas unilaterales y seguras.
Cuando encuentran una foto en uno de los libros de Valeria y leen la carta escrita en el dorso, la única opción plausible parece intentar encontrar a la dueña para devolvérsela. Y tal vez, de paso, tratar de solucionar algunos de sus problemas por el camino.

Los universos de Al final de la calle 118 y Cosas que escribiste sobre el fuego se cruzan una última vez en una novela que nos habla del duelo y los fantasmas, escrita por una de las voces más prometedoras de la literatura juvenil española.

Pájaro Azul es el último libro publicado de Clara Cortés y, al mismo tiempo, la novela que pone fin a la trilogía de La Calle 118. Recupera a dos personajes de sus anteriores trabajos: a Simon, de Al final de la calle 118, y María, de Cosas que escribiste sobre el fuego, que en sus respectivos epílogos ya anunciaban este encuentro. Con esta historia, la autora cierra un círculo perfecto en el que ambos se enfrentan a su pasado e intentan pasar página respecto a asuntos que ya pudimos conocer en los libros anteriores. Pese a todo, no es necesario leer las anteriores novelas para poder leer Pájaro Azul, ya que, en realidad, son libros autoconclusivos, pero que presentan un nexo entre sí. Aunque sí es cierto que, si leéis Pájaro Azul sin antes leer los anteriores, os comeréis algún spoiler, pero os enteraréis perfectamente de la historia.

El duelo es el gran protagonista de esta historia, donde los personajes principales luchan para superar sus fantasmas del pasado. Como ya es costumbre, los personajes de Clara Cortés presentan un gran desarrollo, por lo que a medida que avanzan las páginas podemos vivir junto a Simon y María la clara evolución que sufren desde el inicio de la novela hasta su desenlace. De este mismo modo, no es difícil empatizar con los personajes, ya que uno conoce perfectamente su situación.

Clara Cortés, al igual que lo hizo en Cosas que escribiste sobre el fuego, plasma la ansiedad de una forma en la que no es difícil entender lo que los personajes están sintiendo, pues las descripciones de la autora son precisas. No la he vivido en primera persona, pero conozco a gente que sí y que ha señalado en distintas ocasiones ejemplos de cómo no debería ser tratada y como sí. Por tanto, creo que la historia puede ayudar también a aquellas personas que sufran ansiedad a intentar curarse, o, al menos, sentirse comprendidas.

La relación de amistad entre Simon y María está, a mi parecer, muy bien construida. Como dos desconocidos se encuentran por casualidad y, poco a poco, a lo largo de las más de cuatrocientas páginas, se van dejando conocer y ayudarse mutuamente. Ahí creo que radica el encanto de leer Pájaro Azul sin conocer a los personajes, pues uno se encuentra en su misma situación y quizás el interés es mayor. Eso sí, aún conociendo su pasado, como es mi caso, se disfruta igual de la gestación de esta relación tan real como los personajes.

Al igual que ya hizo en Al final de la calle 118, retoma la prostitución, un tema a la orden del día, pero que sigue siendo tabú y que no en muchos libros juveniles es mencionado. Lo introduce con inteligencia otorgando más peso también a un personaje que ya conoceréis si habéis leído el primer libro de la trilogía. Clara Cortés reivindica la dignidad de la mujer en una sociedad patriarcal como la que vivimos.

La autora da visibilidad, además, a la comunidad LGBTIQ + incluyendo a parejas homosexuales de una manera completamente normalizada. Aunque no sean protagonistas de esta historia, la autora incluye al colectivo sin que la sexualidad de los personajes en cuestión sea más relevante que su importancia en la trama.

Si aún no os he convencido, por cualquier motivo, de por qué debéis leer Pájaro Azul, dadle una oportunidad solamente por leer a Clara Cortés. Da igual la historia que cuente, qué escriba, ya que siempre es un placer leer a esta autora. Tiene un estilo único que, aunque no sea excesivamente rebuscado, consigue conectar con la persona que la esté leyendo y transmitir todos los sentimientos y valores encerrados en sus historias.



En conclusión, Pájaro Azul es una perfecta conclusión a una trilogía con unos personajes tan bien construidos que llegas a conocer en todas sus dimensiones. Una historia sobre el duelo en la que sus protagonistas aprenden a dejar atrás el pasado y luchar por el presente.